Tuve suerte de vivir en una época donde no existían las consolas. Lo más parecido eran
microordenadores donde tras ajustar el cabezal del
casete, esperar cinco minutos, colgarse al final de la carga y volver a empezar, podías echar una partida y no durante mucho tiempo, puesto que estabas ocupando el único televisor de la casa. Y digo suerte porque para muchos fue la puerta al mundo de la programación, no como en "
Juegos de guerra" pero podías hacer programas sencillitos en algún lenguaje, en el caso del
Spectrum Basic, e incluso iniciarte en
lenguaje ensamblador con la búsqueda de los famosos
pokes para conseguir ventajas en los juegos.
Visto desde la perspectiva actual asombra como podíamos entretenernos con unos cacharros tan limitados, cualquier móvil supera en memoria y capacidad gráfica al pobre
Spectrum (48 kb de Ram y 256x176 a 16 colores, con la pequeña trampa de poner los píxeles en alta y los colores en baja resolución). De hecho, cualquiera que vea el vídeo tendrá que poner una buena dosis de imaginación para reconocer algo en los manchurrones de puntos en movimiento.
Por desgracia, entré tarde en ese mundillo aunque dio tiempo a trastear los suyo. Recuerdo haberlo usado para generar diagramas de radiación de antenas en una asignatura de la carrera, con un programita en
Basic, mientras otros se comían los mocos con un flamante
286. O aficionarme a enredar con las
protecciones anticopia de algunos juegos. Como fanático de las recreativas en general y del
Golden Axe en particular, me alegró saber que la industria (Virgin en este caso) se había molestado en hacer una conversión del mítico juego al Spectrum, allá por el año 90. Aunque comercialmente saldría software durante un par de años más, sabíamos que estábamos ante el ocaso de una etapa. Nos había costado lo suyo hacernos con ese trozo de chatarra y, por desgracia, pasarían años antes de ponerle las zarpas encima a un pc.
Virgin debió sacar la versión por completar el abanico de sistemas que existían en los hogares en ese momento. Algo parecido ocurrió con
Street Fighter II. Si, existen versiones en spectrum tanto de
Street Fighter como de
Street FighterII. El juego excedía las capacidades de la máquina en cuestión, aunque era habitual ver software con dos y más cargas, y los programadores optaron por mantener la jugabilidad,y cierto colorido, a costa de mover los personajes en baja resolución. Muy destacable la banda sonora, aquellos a los que les parezca estar escuchando despellejar a un gato vivo tienen que saber que el sonido se generaba en el spectrum con un modesto speaker de un bit (el modelo 48 k).
Llegué tarde y aun más tarde conseguí este jueguecito. Perdí el interés y entre unas cosas y otras ni siquiera llegué a acabarlo. Hoy, a través de esta
página podemos jugarlo e incluso aprovechando que alguien modificó el cargador, podemos ver directamente el final. Para la captura se ha usado
CamStudio (gratuito y muy sencillo de usar, en español
aquí).
Si los ojos han dejado de llorar podemos compararlo con la
recreativa original o ver algunas
capturas.
